En qué consiste un hosting compartido
Foto por Iakobchuk En Envato Elements
El hosting compartido se refiere a la práctica de que varios sitios web compartan los recursos de un único alojamiento. Esto significa que la capacidad total se divide entre los usuarios que pagan una cuota por alojar el contenido de su sitio web.
El alojamiento compartido es beneficioso para sitios web que no requieren excesivos recursos, como los que tienen poco tráfico. Cada sitio web es independiente y los webmasters tienen control sobre su contenido y pueden instalar plugins y configurar sus sitios como deseen.
Sin embargo, el hardware que permite el funcionamiento del servidor se comparte entre todos los usuarios.
Cuando se utiliza el hosting compartido, los recursos del servidor, como la memoria RAM y la CPU, se distribuyen entre todos los usuarios. En caso de que un usuario necesite más recursos, puede optar por un servidor dedicado, ya que compartir recursos podría dar lugar a problemas de rendimiento.
Ventajas de un Hosting compartido
Ahorro en costes: el alojamiento compartido tiene sus ventajas, como el ahorro de costes, ya que es más barato que contratar un servidor dedicado. Esto lo hace ideal para iniciar un sitio web modesto que no requiera recursos excepcionales.
No obstante, es importante tener en cuenta que el alojamiento compartido puede no ser adecuado para todos los propietarios de sitios web, ya que los distintos sitios web tienen necesidades de recursos diferentes.
Mantenimiento a cargo del proveedor: también vamos a evitar tener que encargarnos del mantenimiento y las soluciones a los posibles fallos que aparezcan. Todo esto va a correr a cargo de la empresa con la que hemos contratado el servidor. Es una manera de liberarnos de trabajo y complicaciones.
Facilidad de uso: no se necesita una gran experiencia para poder utilizar este tipo de servicios. El manejo es sencillo si lo comparamos con otras opciones, además de tener nuestro acceso privado para poder gestionar todo rápidamente. Una vez más, es interesante para principiantes que simplemente quieran crear una web sencilla.
Gran variedad de herramientas y configuración: lo normal es que el propio proveedor también ofrezca una serie de herramientas que podemos utilizar, así como configuración que podemos tener en cuenta. Podremos de esta forma configurar más fácilmente nuestro sitio web sin tener grandes conocimientos.
Escalable: podemos ir adaptando el hosting compartido a nuestras necesidades. Podemos empezar con un plan básico que disponga de menos recursos, pero si nuestra web requiere de algo superior con el paso del tiempo podremos contratar otro plan que ofrezca mejores condiciones en cuanto a rendimiento.